Último deseo cumplido: ¡Haike siente el mar Báltico y brilla de felicidad!
Descubra cómo el Wish Car de ASB permite a personas con enfermedades graves realizar viajes inolvidables al Mar Báltico.

Último deseo cumplido: ¡Haike siente el mar Báltico y brilla de felicidad!
El olor a sal en el aire, el sonido de las olas: para muchos esto es el paraíso. Pero para las personas con enfermedades graves, el acceso al Mar Báltico se convierte a menudo en un sueño incumplido. Sin embargo, con la ayuda de proyectos innovadores y solidarios como el ASB Wish Car, estos sueños se están haciendo realidad. En las carreteras del norte de Alemania, estos oasis móviles forman parte de una maravillosa historia que conecta a personas en la última etapa de sus vidas.
Haike es uno de ellos. El 2 de julio de 2025 se hace realidad el deseo de una mujer gravemente enferma de visitar el mar Báltico, cerca de Grömitz. Emprende el viaje con su compañero Georg y un dedicado equipo del ASB-Wünschewagen. Sufre ELA y necesita cuidados las 24 horas del día. Pero a pesar de los desafíos asociados con su enfermedad, ese día el Mar Báltico estaba en su mejor momento: temperaturas suaves y un cielo sin nubes.
Un día inolvidable junto al mar.
El acceso al agua no es fácil para Haike. La linda silla de ruedas especial y el equipo médico necesario, como ventiladores, facilitan el viaje, pero llegar al agua sigue siendo difícil para ellos. Aun así, puede sentir el viento en la cara y oler el aire salado, y eso es suficiente para hacerla feliz. Cuando el grupo de turistas le regala un suéter rosa brillante, sus ojos brillan de alegría.
Una parada en el salón de la playa calma a Haike. A pesar de que sus fuerzas menguan, la alegría que siente es palpable. “Más feliz de lo que he estado en mucho tiempo”, comenta acertadamente la enfermera Sandy. Al final, regresan a casa con recuerdos inolvidables, recuerdos que son más valiosos que cualquier viaje.
Atreverse a desear: una baza para la calidad de vida
Las historias de los carros de los deseos suelen ser similares y, sin embargo, únicas. El berlinés Hanns-Rüdiger también forma parte de esta comunidad especial. Ha sufrido una enfermedad del sistema nervioso central durante más de una década y vive en un asilo de ancianos. Para él, el coche de deseos de ASB cumplió su sueño de viajar por un día a Zingst, en el Mar Báltico, un lugar lleno de recuerdos de anteriores días familiares. El olor de los pinares y del pescado recién pescado le llevó a un viaje nostálgico.
"La visita a la playa fue lo más destacado del viaje", dice, y el fotógrafo del equipo capturó los momentos especiales. Hoy estas instantáneas decoran la pared de su habitación en la residencia de ancianos y le dan fuerzas.
Amor fraternal en el Mar Báltico
Otro ejemplo conmovedor es la historia de Hansi (nombre cambiado), que tiene una enfermedad terminal y quiere visitar a su hermano en el Mar Báltico. Gracias a la ayuda del carrito de deseos de ASB, este deseo puede hacerse realidad. Con una distancia de unos 400 kilómetros desde Leipzig hasta la costa del Mar Báltico, esto no sólo facilita su viaje, sino que también le garantiza una estancia en un alojamiento sin barreras.
Cuando llegan a Altwarp, donde el hermano y su mujer ya esperan a Hansi, en lugar de las vísperas previstas se celebra una velada de barbacoa en la terraza con vistas al puerto. Los recuerdos compartidos cobran vida mientras disfrutan de sándwiches de pescado y sienten el viento en la nariz. Una visita a la isla de Usedom, en el Mar Báltico, trae aún más momentos de felicidad que los hermanos llevarán en sus corazones para siempre.
Después del camino a casa, con un último café en Neuhof, una cosa queda clara para todos los involucrados: los voluntarios del ASB Wish Cart hacen un gran trabajo y dependen de las donaciones para seguir haciendo posible experiencias tan inolvidables.
Muchos, como Haike, Hanns-Rüdiger y Hansi, experimentan de nuevo la incomparable sensación de sentir el mar de cerca. Sus historias muestran que nunca es demasiado tarde para cumplir tu último deseo y celebrar la alegría de vivir. El Mar Báltico es más que un simple lugar; es un símbolo de esperanza, alegría y el vínculo inquebrantable del amor.
Informes Moin.de que Haike pasó un día inolvidable en el Mar Báltico con su pareja y el coche de deseos de ASB. También Berlín-Live cuenta de Hanns-Rüdiger, cuyo deseo de ir al mar se hizo realidad gracias al coche de los deseos de ASB. Finalmente también informa Turingia24 sobre Hansi, que pudo visitar a su hermano en el Mar Báltico. Las historias de estas personas son inspiradoras y muestran la importancia de las pequeñas cosas de la vida.