Trenes abarrotados y cierre de puentes: ¡caos en el tráfico ferroviario en Oldenburg!
Oldenburg sufre retrasos en los trenes y hacinamiento debido a que el puente Hunte tiene vía única. Servicio de reposición a partir del 6 de diciembre.

Trenes abarrotados y cierre de puentes: ¡caos en el tráfico ferroviario en Oldenburg!
Los problemas ferroviarios entre Oldenburg y Bremen aumentan cada día. Desde principios de noviembre, el puente ferroviario sobre el Hunte en Oldenburg sólo es accesible por una única vía. Esto no sólo provoca retrasos masivos, sino también trenes abarrotados, lo que se ha convertido en un desafío diario para los viajeros. Matthias Handschuch, un viajero afectado y miembro de la asociación de pasajeros ProBahn, relata situaciones estresantes en las que los pasajeros incluso tuvieron que bajarse porque se excedía la carga por eje del tren. Subir y bajar también lleva más tiempo, lo que aumenta aún más los tiempos de espera y, por tanto, los retrasos. Si bien los trenes en Oldenburg circulan con relativa fluidez, la situación empeora con cada estación en dirección a Bremen.
Deutsche Bahn se ha hecho cargo de la reparación del puente y pide disculpas por las molestias. A partir del viernes 6 de diciembre por la tarde, el Huntebrücke estará completamente cerrado durante tres días. Durante el cierre, se creará un servicio de autobús de sustitución para aliviar la carga de los pasajeros. A partir del martes 9 de diciembre, el puente debería volver a ser accesible por dos vías, un rayo de esperanza para los viajeros de la región.
Esfuerzos políticos para soluciones a largo plazo
Las dificultades actuales han llamado la atención del alcalde Jürgen Krogmann, quien desde hace años pide la nueva construcción del puente ferroviario levadizo. Esta exigencia se reiteró en la primera conferencia ferroviaria en la región Weser-Ems en 2023. Krogmann expresó su preocupación por los frecuentes fallos del puente, que ponen en peligro tanto el tráfico de pasajeros como de mercancías hacia Oldenburg y Jade-Weser-Port. En una conversación con representantes federales en el verano de 2023 también se discutió un informe de Deutsche Bahn, que otorgaba al puente Oldenburg Hunte una nota escolar de 2.
Curiosamente, sólo se han previsto obras de renovación menores en el puente hasta 2025, un fuerte indicio de que es posible que los responsables no se estén tomando el problema tan en serio. Sin embargo, las conversaciones con el presidente de IHK, Jan Müller, reforzaron la importancia de construir un nuevo puente, que se destacó como un proyecto de infraestructura central. Hay esfuerzos para incluir el proyecto en los planes de financiación de los fondos de infraestructura.
Inversiones en infraestructura
A nivel nacional, el gobierno federal tiene previsto invertir 166 mil millones de euros en infraestructuras hasta 2029. De ellos, alrededor de 107 mil millones de euros se destinarán al ferrocarril y apoyarán la renovación de líneas ferroviarias y puentes de autopistas en mal estado. El paquete de infraestructuras también prevé 52.000 millones de euros para carreteras federales y 8.000 millones de euros para vías navegables. Se espera que estas medidas aumenten las inversiones en transporte en alrededor del 60 por ciento en comparación con el período 2020-2024.
Deutsche Bahn ha acogido con satisfacción el volumen de financiación adicional, pero pide compromisos sostenibles más allá de 2027. En vista de la renovación general prevista de más de 40 rutas muy transitadas, incluida la concurrida Riedbahn entre Frankfurt y Mannheim, la dirección parece clara: la puntualidad y la fiabilidad deben mejorarse a largo plazo. Sin embargo, está claro que las obras y las restricciones a corto plazo para los viajeros seguirán siendo inevitables.
Los acontecimientos en torno al puente Hunte muestran claramente lo importante que es una solución oportuna y sostenible a los problemas existentes en el tráfico ferroviario. Sólo mediante medidas específicas y la implementación de los proyectos de infraestructura necesarios se podrá mejorar a largo plazo la situación de los viajeros. Bernhardt se muestra optimista sobre su jornada diaria: “¡En algún momento los responsables tendrán que tener buena mano y controlar los puentes!”