Maratón relámpago en el distrito de Pinneberg: ¡los servicios de emergencia también se ven afectados!
Servicios de emergencia en Elmshorn: Los radares también detectaron servicios de rescate, mientras que la violencia contra ellos va en aumento. ¿Dónde están los que brindan ayuda?

Maratón relámpago en el distrito de Pinneberg: ¡los servicios de emergencia también se ven afectados!
En el distrito de Pinneberg, los nuevos radares de tráfico están dando mucho que hablar: últimamente no sólo los conductores, sino también la policía, los bomberos y los servicios de rescate son sorprendidos si exceden el límite de velocidad durante sus operaciones. La buena noticia para los servicios de emergencia: quien conduzca con luces intermitentes y sirena no recibirá multas. Sin embargo, las cosas son completamente diferentes para los voluntarios que se apresuran a llegar a la estación en sus coches privados. No hay excepciones para ellos; También tienen que pagar por exceso de velocidad, así. shz.de informó.
Pero mientras los radares garantizan regulaciones claras, los servicios de emergencia en muchas otras regiones luchan contra una tendencia preocupante: la violencia contra los rescatistas está aumentando. En Nochevieja, por ejemplo, los servicios de emergencia de Berlín fueron atacados con pirotecnia, botellas y piedras. Los servicios de emergencia en la zona de Achim vivieron una noche similar, aunque bastante tranquila, en la que no se produjeron incidentes importantes a pesar de las festividades generales. Sin embargo, el jefe de policía Simon Grommisch da testimonio de un ligero aumento de los ataques a agentes de policía; En 2021 se registraron unas 20 incidencias, cifra que tampoco ha mejorado este año kreiszeitung.de informó.
Aumento de la brutalidad contra los servicios de emergencia
Los informes de violencia contra los servicios de emergencia están aumentando: a menudo se trata de insultos verbales, pero a menudo se convierten en agresiones físicas. En su trabajo diario, los socorristas tienen que lidiar con insultos, amenazas e incluso golpes o empujones. En casos raros, también se producen lesiones graves, como las encontradas en un estudio de safer-rettungsdienst.de estar documentado. Más del 50 por ciento de los encuestados se sentían insuficientemente preparados para tales conflictos. Muchos relatan peores experiencias que pueden tener consecuencias no sólo físicas sino también psicológicas, como trastornos de estrés postraumático.
Estos desafíos sociales ensombrecen el valioso trabajo de los servicios de emergencia, que a menudo se encuentran bajo una enorme presión. Frank Wenzlow, un paramédico experimentado, considera complejas las causas de la creciente falta de respeto. El alcohol, las drogas y el embotamiento social general contribuyen a este problema. No sólo pide más medidas de seguridad, sino también propuestas para mejorar la percepción de los voluntarios y reducir los obstáculos burocráticos que a menudo hacen que el trabajo voluntario sea un paseo por la cuerda floja.
El camino hacia la mejora
En este contexto, el jefe de policía Grommisch exige que se mejore fundamentalmente el tono en la sociedad y durante las operaciones. Está claro que la discusión afecta no sólo a los servicios de emergencia, sino a toda la comunidad. La máxima prioridad debe ser la formación para reducir la tensión y las medidas preventivas para mejorar la seguridad de los socorristas. Las tecnologías modernas, como las cámaras corporales, también son un tema muy debatido, que podrían hacer que los atacantes sean conscientes de la dirección de su agresión.
No se puede negar que el respeto por quienes luchan por nuestra seguridad y salud debe volverse más importante. Teniendo esto en cuenta, es hora de que toda la sociedad respalde a sus socorristas y les brinde el reconocimiento que merecen, ya sea en su trabajo voluntario o en puestos profesionales. Sólo entonces se podrá lograr un cambio en la peligrosa tendencia de violencia contra los servicios de emergencia.