¡Florian Illies revela el exilio de la familia Mann en la Costa Azul!
El nuevo libro de Florian Illies examina el exilio de Thomas Mann en la Costa Azul durante la década de 1930 y los desafíos que enfrentó su familia.

¡Florian Illies revela el exilio de la familia Mann en la Costa Azul!
Con su nuevo libro "Cuando se pone el sol", Florian Illies ha creado un animado panorama del exilio de la familia literaria Thomas Mann en la Costa Azul en los años 30. Esta narrativa es un testimonio poderoso de los desafíos y tensiones que surgieron con la vida en el exilio. La historia comienza en 1933 cuando, después de que los nazis llegaron al poder en Alemania, los Mann encuentran refugio en el pequeño pueblo pesquero de Sanary, que rápidamente se convierte en un refugio popular para los escritores alemanes. Según ga-online.de, Thomas Mann, que llegó con su esposa Katia y sus dos hijos, vivió una época caracterizada por el estrés y el conflicto interno.
Sanary, con unos 3.000 habitantes, se convierte en el nuevo hogar de la familia Mann. Illies describe cómo la villa La Tranquille, donde vive la familia, se convierte en un lugar cultural e histórico. Los Mann organizan veladas literarias y se reúnen con otros exiliados destacados como Lion Feuchtwanger. Estas veladas no sólo ofrecen un toque de normalidad en una vida cotidiana difícil, sino que también son un signo de vitalidad intelectual que continúa a pesar de las circunstancias adversas. En el verano de 1933, Thomas Mann y su familia trabajaron para asegurar su situación financiera a pesar de las expropiaciones nazis. Transferieron parte de sus activos a Suiza, lo que estabilizó sus medios de vida sanary-tourisme.com informa.
Conflictos internos y tensiones familiares.
Sin embargo, la situación de los Mann no se caracterizó sólo por la presión externa. El propio Thomas Mann se encontraba en una profunda crisis interior y luchaba con su identidad como emigrante. Se sintió humillado cuando lo describieron así y expresó en sus diarios un “rechazo interior al martirio”. La incertidumbre de regresar a Alemania le pesaba mucho, especialmente después de que le confiscaran su villa en Munich. Se sentía como si hubiera “caído del cielo”, un sentimiento que contrasta con las experiencias de otros emigrados como Heinrich Mann, que enfrentó sus propias luchas en la oposición, según literaturportal-bayern.de.
Aunque la presión exterior fue grande, algunos de los hijos de Mann, como Erika y Klaus, brillaron por su incansable compromiso contra los nazis. Intentaron animar a su padre a que no se desanimara y no regresara a Alemania. Pero las tensiones dentro de la familia aumentaron, especialmente en relación con la participación de Klaus en la revista del exilio "Diesammlung". Thomas Mann se esforzó por permanecer fiel a su estricta vida cotidiana, lo que se reflejaba en sus meticulosos registros de su propia salud.
Una mirada atrás y hacia el futuro
En su obra, Illies utiliza diarios y memorias para iluminar las complejas relaciones de la familia Mann y su entorno durante los años de exilio. A pesar de las circunstancias adversas y las dudas que acosaban a Thomas Mann, logró desempeñar un papel importante en el exilio con su perspectiva literaria. Con una mezcla de duelo por los viejos y la búsqueda de un nuevo lugar en la vida, surgió una intensa cultura del recuerdo que perduraría incluso después del exilio. Complementado con los recuerdos y las historias de sus hijos, Illies ofrece una nueva mirada a la vida de los Mann durante esta época llena de acontecimientos. De esta manera, no sólo arroja luz sobre los destinos individuales, sino también sobre el legado cultural que dejó la familia.