Bremerhaven resuelve los enigmas climáticos con hielo de 1,2 millones de años

Transparenz: Redaktionell erstellt und geprüft.
Veröffentlicht am

Un equipo de investigación internacional en Bremerhaven estudia hielo de 1,2 millones de años de antigüedad de la Antártida para comprender los cambios climáticos.

Ein internationales Forschungsteam untersucht in Bremerhaven 1,2 Millionen Jahre altes Eis aus der Antarktis, um Klimaveränderungen zu verstehen.
Un equipo de investigación internacional en Bremerhaven estudia hielo de 1,2 millones de años de antigüedad de la Antártida para comprender los cambios climáticos.

Bremerhaven resuelve los enigmas climáticos con hielo de 1,2 millones de años

Un equipo de investigación internacional ha descubierto un núcleo de hielo en la Antártida que podría revelar los secretos climáticos de los últimos 1,2 millones de años. El núcleo de hielo, de aproximadamente un metro de largo y tan grueso como un puño cerrado, contiene un verdadero tesoro de 20.000 años de historia de la Tierra. Fue encontrado en un glaciar a una profundidad de 2.800 metros y ahora está siendo examinado cuidadosamente en el Instituto Alfred Wegener, Centro Helmholtz de Investigación Polar y Marina (AWI) en Bremerhaven. Alto NWZonline El núcleo de hielo proporciona información interesante sobre los cambios climáticos pasados, especialmente sobre la misteriosa transición de edades de hielo a fases más cálidas.

Lo interesante es que el ritmo de los cambios climáticos cambió fundamentalmente hace entre 900.000 y 1,2 millones de años. Si bien el equipo de Bremerhaven quiere arrojar más luz sobre el papel de los gases de efecto invernadero en la atmósfera, el laboratorio de hielo es un centro importante para esta investigación. Aquí, con una temperatura helada de -30 grados, se realiza un trabajo intensivo gracias al sonido del corte de hielo fresco. Hasta diez científicos intentan descifrar juntos los locos fenómenos meteorológicos del pasado. El trabajo se lleva a cabo en equipo; después de todo, los científicos tienen diferentes orígenes nacionales y están unidos por un objetivo común.

Investigación del diario climático.

El núcleo de hielo no es sólo un simple bloque de hielo, es un archivo climático cronológico que contiene pistas importantes sobre el calentamiento global y el cambio climático. Un centímetro del núcleo corresponde a unos 200 años de historia climática. Estas muestras de hielo son cilíndricas y tienen un diámetro de 10 a 15 cm. El equipo tiene previsto obtener unas 100.000 submuestras del núcleo de hielo, que luego se distribuirán a 12 institutos científicos de Europa. Un análisis exhaustivo de las burbujas de aire atrapadas permite reconstruir la composición química de la atmósfera en el pasado. Enfocar informa que en el laboratorio de hielo se están realizando numerosas pruebas, incluidas pruebas de conductividad eléctrica y depósitos de polvo, para conocer mejor las circunstancias del momento.

Dado que las tablas climáticas se remontan a más de 800.000 años, los núcleos de hielo proporcionan no sólo a los historiadores sino también a los investigadores del clima información valiosa sobre el entorno cambiante. Los análisis han demostrado repetidamente que fenómenos como las erupciones volcánicas, los impactos de meteoritos e incluso las actividades humanas dejan huellas en el hielo que merecen ser estudiadas en detalle. Revisión mundial de los océanos muestra que la medición de las burbujas de aire en los núcleos de hielo permite sacar conclusiones directas sobre la composición atmosférica en diferentes épocas geológicas.

El trabajo en el laboratorio de hielo es crucial porque implica comprender mejor el sistema climático y desarrollar modelos climáticos más precisos. Gracias a estas colaboraciones internacionales y a la alta tecnología utilizada en la investigación, los científicos están idealmente equipados para afrontar los desafíos de la investigación climática.